Estos seis meses que han pasado me han hecho abrir los ojos, volver a nacer de nuevo y ver ese amanecer lleno de niebla.
Finalmente, he despertado de una pesadilla en blanco y negro, lleno de corazones oscuros, he puesto los pies al suelo y he mirado al cielo.
¿Y qué es lo que he visto?
He visto sueños. Mis sueños. Sueños desperdigados entre las nubes, desocupados y volando libremente. Pero ahora he vuelto y los he recogido, he hecho que vuelvan. He deseado con todas mis fuerzas que vuelvan, he vuelto a soñar en el futuro, en las ganas de vivir, en las ganas de volver a sentir algo que no sea dolor.
Como el tiempo pasa, los corazones se rompen y se regeneran a base de sueños, a base de almas que están al otro lado del mundo, almas con luz propia, ciudades con alma. Almas sin miedo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario